El 30 de septiembre de 2025, participé en el foro “Datos con Sentido de Justicia”, organizado por GIZ (Cooperación Técnica Alemana), en colaboración con Juicio Justo, A.C., bajo un formato denominado Open Space. El evento fue en el Club de Banqueros de la Ciudad de México y congregó a representantes de poderes judiciales, de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, organizaciones de la sociedad civil, académicos, periodistas y abogados postulantes.
Hablé sobre “Justicia basada en evidencia: el uso de datos para la transformación institucional y el acceso efectivo a la justicia”, bajo tres ejes clave:
- Transformación institucional: cómo los datos fortalecen la planeación estratégica, la evaluación de desempeño y la rendición de cuentas.
- Toma de decisiones basada en evidencia: uso de indicadores para mejorar la gestión judicial.
- Enfoque centrado en las personas: cómo los datos permiten detectar necesidades específicas, reducir tiempos de respuesta y hacer más accesible el sistema de justicia.
Todo en el marco de la justicia abierta y transparencia de datos.
Lo anterior relacionado con los temas que implementé en mi gestión como Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Querétaro, de 2021 a 2024 y los avances que dejé como la creación de la Unidad de Estadística, un nuevo sitio web y rendición de cuentas de los jueces.
La justicia como sistema de información.
- Hice referencia a que los tribunales somos entes generadores masivos de muchos datos: expedientes, resoluciones, audiencias, pero que partimos de varios problemas porque la información está en desorden o desarticulada, y no se toma en cuenta para las decisiones que vayan transformando a la institución. Insistí en la necesidad de institucionalizar una cultura de datos en los poderes judiciales y de cómo éstos me ayudaron a tomar decisiones para mejorar el servicio de impartición de justicia.
Transformación institucional a partir de datos.
- Diseño e implementación de sistemas de control y monitoreo jurisdiccional siempre son necesarios. Expuse los sistemas con los que cuenta el Poder Judicial del Estado de Querétaro, que en materia penal es el SIU (sistema informático único, creado desde Cosmos) y Praxis que aplica al sistema civil, familiar, mercantil y laboral.
- Uso de indicadores para detectar cuellos de botella y reasignar cargas de trabajo.
- Puse ejemplos reales de cómo la analítica permitió reducir los tiempos de resolución en ciertas materias, como las comunicaciones electrónicas, los exhortos electrónicos entre jueces del Estado, la eliminación de libros de registro físicos y evitar doble trabajo al personal, etcétera.
Toma de decisiones basada en evidencia.
- Priorización de políticas públicas judiciales con base en estadísticas confiables y evaluación del desempeño judicial: eficiencia, eficacia, productividad.
- En esta parte puse de ejemplo:
- La reducción en los tiempos de respuesta que tuvieron los jueces civiles, familiares y mixtos a partir de analizar sus estadísticas, es decir, cuánta carga de trabajo recibían (promociones) y la cantidad de sentencias pendientes por dictar. A partir del análisis de dichos números y de la implementación de sistemas de gestión, se logró que las promociones estuvieran acordadas en los términos que permite la ley y sentencias dictadas en plazos razonables. Mostré que cuando inicié mi gestión (1 de octubre de 2021), los jueces tenían mayores pendientes y menor productividad, y al final de ésta (30 de septiembre de 2024), la estadística se invirtió, es decir, era mayor la productividad y menores los pendientes.
Acceso efectivo a la justicia con enfoque centrado en las personas.
A partir de los datos estadísticos sobre:
- Delitos más comunes de violencia contra la mujer y el sentido de resoluciones, creamos 4 juzgados penales especializados en la atención de delitos contra mujeres, capacitando de manera específica a cuatro juezas para una mejor atención de esos casos. Dichos juzgados conocen de los delitos de violencia familiar, violencia de género, abuso sexual, violación y feminicidio.
- A partir de un análisis de cuánto tiempo tardaba una mujer que solicitaba una medida de protección urgente en materia familiar, es que también propuse la creación de un juzgado familiar exclusivo para atender este tipo de medidas, cuyo juzgado trabaja en un sistema de audiencias y oralidad, logrando reducir el tiempo de atención, de tres horas a 25 minutos, en promedio.
- También a partir del análisis de datos, detecté la necesidad de incrementar un juzgado más en oralidad penal, lo cual nos ha permitido que continuemos con un sistema de gestión sano y sin colapso.
- Además, mejoramos los servicios de orientación jurídica y atención ciudadana, a partir de encuestas que realicé, donde nos dimos cuenta de que las personas no conocían sus derechos, no conocían a la institución y tenían dudas de cuándo acudir y qué hacer. Lo anterior generó las campañas:
- “Conoce tus derechos”;
- “Caravana itinerante” (ir a las comunidades a acercar servicios de orientación);
- “Conoce al poder judicial (asistir a escuelas a dar charlas sobre la institución y cómo prevenir violencia en las mujeres desde edades tempranas, así como orientación sobre justicia para adolescentes);
- Creamos un nuevo sitio web con información accesible.
- Creamos un Chat Bot denominado “Lex” que está en la página oficial, al que se le hacen preguntas sobre la institución u orientaciones jurídicas.
- Contamos con la herramienta “Inegra2” para que personas con discapacidad puedan navegar por nuestro sitio web.
- Lanzamos una nueva App y promovimos el expediente electrónico, con la finalidad que abogados y usuarios acudan a juzgados sólo cuando es necesario, pues dichas herramientas permiten consultar sus acuerdos desde sus despachos o desde donde se encuentren. Lo anterior, a partir de los datos que analizamos sobre la cantidad de personas diarias que nos visitan, lo que generaba problemáticas de movilidad y espacios de estacionamiento para acudir a Ciudad Judicial.
Concluí señalando que apostar por una justicia basada en evidencia es apostar por una justicia más humana, eficiente y accesible.
El poder judicial del siglo XXI debe ser una institución que aprenda de sus datos y los traduzca en decisiones justas.

